El almendro:
Familia
botánica: Rosáceas (Rosaceae).
Nombre
científico: Prunus amygdalus
Basch.
El tronco cuando es joven es liso,
pasando a ser muy agrietado con el
tiempo, siendo este agrietamiento
característico de esta especie.
La
corteza es verde, cuando el árbol
es joven, y marrón y grisácea
cuando el árbol es adulto.
Órganos
fructíferos: ramos mixtos,
chifonas y ramilletes de mayo, que
presentan yemas solitarias. El de
mayor importancia es el ramo de mayo.
Hojas:
son de tipo lanceolado, largas, estrechas
y puntiagudas, más pequeñas
que las del melocotonero, y más
planas, de color verde intenso, aunque
se observan diferencias apreciables
de color entre variedades. Los bordes
son dentados o festoneados.
Flor:
es pentámera con cinco sépalos,
cinco pétalos con colores variables
entre blanco y rosado; estos pétalos
pueden estar más o menos escotados
centralmente, llegando incluso a solaparse
en algunas variedades.
Fruto:
Drupa con exocarpo y mesocarpo correosos
y endocarpo duro.
Semilla:
La semilla es el producto de consumo;
posee dos tegumentos envolventes difícilmente
separables, la testa y el tegmen,
que inicialmente son verdosos, pasan
a color amarillo y de él a
castaño claro y marrón,
que va oscureciéndose con el
tiempo; siendo un buen índice
de envejecimiento de la semilla.
Polinización:
especie autoincompatible, por lo que
requiere la polinización cruzada.
Deben colocarse polinizadores para
obtener un elevado cuajado para que
la cosecha sea rentable. Un carácter
notable es la xenia que se produce
cuando tiene lugar la fecundación
cruzada con almendro salvaje (amargo),
dando almendras amargas.
2.
Clima y suelo:
El
almendro es una especie muy rústica,
por lo que sobrevive en condiciones
muy complicadas, aunque disminuye
su rentabilidad.
Es
un frutal de zonas cálidas,
por lo que resulta poco tolerante
al frío, requiere escasas horas-frío
(200-400) y es muy tolerante a la
sequía.
Demanda
un largo período para la maduración
del fruto, de forma que la floración
tiene lugar en enero y hasta nueve
meses después no se recolecta.
Se
puede producir en secano de 300 mm,
pero la rentabilidad se asegura a
partir de los 600 mm. Para que se
lleve a cabo una adecuada polinización
hay que tener en cuenta los factores
climáticos que afectan a las
abejas (frío, heladas, lluvia,
etc.),
Prefiere
suelos sueltos y arenosos, aunque
vegetan en francos. Le son perjudiciales
los suelos encharcadizos y pesados,
ya que no resiste la asfixia radicular
y es muy susceptible a los ataques
de Armillaria y Phytophthora.
3.
Floración:
La
época de floración en
el almendro tiene una gran importancia
porque influye directamente en las
posibilidades de obtención
de una buena cosecha, debido a la
incidencia de tres factores: la polinización,
las lluvias y las heladas.
El granado:
-
Familia: Punicaceae.
-
Origen: el origen del granado se extiende
desde los Balcanes hasta el Himalaya;
es considerado uno de los frutales
más cultivados desde tiempos
más remotos.
-
Especie: Punica granatum L.
-
Pequeño árbol caducifolio,
a veces con porte arbustivo, de 3
a 6 m de altura, con el tronco retorcido.
Madera dura y corteza escamosa de
color grisáceo.
Las
ramitas jóvenes son más
o menos cuadrangulares o angostas
y de cuatro alas, posteriormente se
vuelven redondas con corteza de color
café grisáceo, la mayoría
de las ramas, pero especialmente las
pequeñas ramitas axilares,
son en forma de espina o terminan
en una espina aguda; la copa es extendida.
-
Hojas: son de color verde brillante,
lustrosas por el haz y con el borde
entero. Nacen opuestas o casi opuestas
sobre las ramas o bien agrupadas formando
hacecillos, tienen forma lanceolada
a abovada, un pecíolo corto
y son ligeramente correosas.
Generalmente
miden 2-8 x 0.8-2 cm, y tienen un
nectario apical que segrega azúcares
(fructosa, glucosa, sucrosa); las
estípulas son rudimentarias
y difíciles de apreciar.
-
Flores: hermafroditas, solitarias
o reunidas en grupos de 2-5 al final
de las ramas nuevas y de 3-4 cm de
diámetro.
Son
grandes y de color rojo, lustrosas,
acampanadas, subsentadas, con 5-8
pétalos y sépalos, persistiendo
el cáliz en el fruto.
En
algunas variedades las flores son
abigarradas e incluso matizadas en
blanco. Florece en mayo-julio, aunque
algunas variedades lo hacen más
tarde.
-
Fruto: baya globosa denominada balausta,
de color rojo brillante, verde amarillento,
o blanquizco, rara vez violeta, cuando
madura, estando coronado por el cáliz,
de 5-8 cm de diámetro, lleno
de semillas y cuenta con una cáscara
coriácea.
Las
semillas son angulares y duras por
dentro, la capa externa de la testa
está cubierta por una capa
delgada o pulpa jugosa, roja, rosa
o blanco amarillenta, astringente,
subácida o ácida.
2.
Clima para cultivar granadas:
El
clima que más conviene al granado
es el clima subtropical e incluso
el tropical. Los mejores frutos se
obtienen en las regiones subtropicales
donde el periodo de temperaturas elevadas
coinciden con la época de maduración
de las granadas.
El
granado exige mucha agua y frescura
para sus raíces y solamente
en estas condiciones es cuando da
muchos frutos de buena calidad. Al
mismo tiempo soporta muy bien la sequía.
Fuera
de las regiones subtropicales, el
granado se adapta bien en regiones
donde la temperatura no alcance los
-15ºC. El árbol no resiste
las temperaturas bajas y solo ciertas
variedades Chinas y del Turquestán,
más rústicas, soportan
mejor los fríos llegando a
soportar temperaturas de -18 y -20
ºC.
El
granado es muy sensible a las heladas
tardías a partir de la entrada
en vegetación.
Prefiere
más bien un clima templado
e incluso caluroso que los relativamente
fríos.
Debido
a su retraso vegetativo y de floración,
corre peligro de que las flores se
vean afectadas por las heladas tardías
de primavera.
En
pleno invierno resiste temperaturas
inferiores a los -7ºC.
Para florecer abundantemente,
los granados deben situarse a pleno
sol, así como para que fructifiquen
deben estar al aire libre, ya que
son los insectos los encargados de
la polinización.
Aunque prefiere los
climas cálidos o templados,
soporta temperaturas mínimas
de hasta -12°C y máximas
de 40°C.
No obstante es sensible
a las heladas de fines de otoño
y principios de primavera.
Es muy resistente
a la sequía; y se considera
de hecho una planta de desierto.